Este tipo de instalación es típico de vehículos todoterreno y 4×4.

Cuando se modifican las ballestas originales del vehículo o las gemelas se traduce en una mejoría de la rigidez, así como una mayor distancia comprendida entre el vehículo y el suelo.

De esta forma se puede conducir por terrenos dificultosos con más equilibro y suavidad, así se evitan posibles golpes con los obstáculos que se encuentren en los caminos que sean desiguales o estén en malas condiciones.

También es muy común la instalación de un bodylift para separar el bastidor de la carrocería, donde se recomienda usar una tornillería de calidad 8.8 mínimo.